Época de muda
La muda depende de varios factores, como la raza del perro su tipo de pelo.
Hay perros como los yorkshire que no mudan el pelo, sigue creciendo hasta que se corta, otros que tienen mucho subpelo, como los Border Collie pierden mucho pelo durante la muda. Durante este periodo, el perro se deshace de gran parte del pelo que lo ha protegido del frío del invierno y se prepara para la primavera con un pelo renovado y fuerte.
Aunque mudan durante todo el año, la mayor parte del pelo lo pierden en dos épocas puntuales: el cambio de primavera a verano, y con el comienzo del otoño.
La muda depende principalmente de factores ambientales: cuando llegan las temperaturas más cálidas y los días empiezan a alargarse, los perros empiezan a cambiar pelo. En los perros que pasan mucho tiempo dentro de casa, este ritmo natural puede verse alterado por la temperatura y la iluminación artificialmente estables durante todo el año y la muda puede acabar siendo una pérdida de pelo continua.
La muda refleja el ciclo natural de crecimiento y muerte del pelo a lo largo de las estaciones. Sin embargo, otros factores pueden afectar a la pérdida de pelo de tu perro, como por ejemplo su estado de salud, su estado hormonal, su alimentación, su manejo y ambiente de vida e incluso su genética individual.
Una mala alimentación, la exposición a situaciones estresantes prolongadas, la realización de baños muy frecuentes son ejemplos de situaciones que podrían prolongar o intensificar la caída estacional de pelo.
¿Cómo puedes hacer frente a la caída de pelo de tu perro?
Durante la muda, los mejores aliados son un buen cepillado y una alimentación adecuada. Los cepillados frecuentes, posiblemente diarios, favorecen la renovación del pelo y evitan que la casa se llene de pelo muerto. En algunos perros la pérdida de pelo puede ser tan intensa que es preferible pasar el cepillo varias veces al día. A la hora de cepillar al perro, lo ideal es hacer pasadas cortas con el cepillo siguiendo la dirección del pelo y penetrando bien en el pelaje, pero con cuidado de no dañar la piel.
Los baños pueden ayudar a deshacerse del pelo muerto, pero no se recomienda bañar al perro más de 1 o 2 veces al mes y siempre recurriendo a un producto específico para perros. Una alimentación equilibrada y de calidad ayuda a prevenir una pérdida excesiva de pelo y a favorecer la salida del nuevo pelaje.
La dieta debería garantizar la correcta aportación de ácidos grasos esenciales omega 3 y 6 (podemos encontrarlos en el aceite de salmón), vitaminas y zinc, además de cumplir con todas las necesidades nutricionales de tu perro. Algunos perros también se pueden beneficiar de suplementos alimenticios que ayudan a prevenir una caída de pelo excesiva. Sin embargo, no siempre es fácil tener bajo control la caída de pelo en un perro en plena muda. Por esto hay que tener a mano una buena aspiradora y rodillo para la ropa. La muda es un proceso normal, pero si crees que tu perro está perdiendo demasiado pelo, tiene parches sin pelo, se rasca mucho o presenta otras alteraciones de la piel o sospechas que esté pasando por una época de fuerte estrés, deberías consultar con tu veterinario de confianza. No todo el pelo que cae depende de la muda.